Quantum
Capítulo 1
Dicen, que el ser humano es el único animal que come sin
tener hambre, bebe sin tener sed y dice, sin tener nada que decir. Desde hace
milenios, la humanidad, ha sabido explotar su entorno, aprovecharlo a su favor,
y a su desarrollo. Puede que demasiado.
Me llamo David, y actualmente estoy en el cuarto año en
desarrollo de tecnologías y energías renovables, de la Universidad de Las
Palmas de Gran Canaria. Siempre desde pequeñín, quise ayudar a la gente, ser
alguien servicial y dejar mi huella en el mundo, motivo por el cual sigo aquí.
Por suerte no estoy solo, estudio con mi mejor amigo y compañero de piso,
Carlos. Ambos estamos en la misma facultad y en la misma clase. Parece
imposible, pero no nos hemos separado desde el parvulario, somos prácticamente
hermanos. La de aventuras que hemos vivido y que nos quedan por vivir…
Hoy nos van hacer la presentación del cuarto año, y nos
darán las pautas a seguir para hacer el proyecto de fin de carrera.
-Chicos, chicas, llegó el momento. Aquí culmina vuestra larga
preparación, el esfuerzo de cuatro largos años. Este año, tenéis que demostrar
lo mejor de vosotros mismos, demostrar quienes sois y elaborar vuestro propio
proyecto. No será fácil, pero una vez rebaséis este obstáculo, ya nada en
vuestra vida, os supondrá un obstáculo-. El profesor seguía hablando y hechando
su discursito, si parece que vamos a la guerra. Así que me limité a copiar lo
que estaba en la diapositiva, las pautas para el proyecto.
-Hey, David, verás… no vamos hacer el proyecto juntos.
-¿Qué? ¿Por qué?
-Shhh baja la voz hombre. Verás, desde que estaba en
primero… bueno mejor te lo digo después al salir de clase.
-Vale.
Pasó una hora y media hasta que la clase terminó.
Aburridisima, solo falto que el profesor concluyera diciendo. “Mis valientes
soldados, luchad con honor, y que Dios os bendiga”
-Carlos, ¿Qué querías contarme?
-Ven.
Me llevó a un lugar alejado, detrás de la facultad, y lejos de
miradas y oídos indiscretos.
-Tío, sí que te lo tomas en serio, ¿tan importante es?
-No tienes ni idea. Verás desde primero de carrera, he
estado trabajando en un proyecto, mi proyecto para fin de carrera.
-¡Ah! Eso explica tus largas ausencias, pensaba que te ibas
de puterio por ahí
-¡No seas tonto! He fabricado, una máquina que cambiará, la
historia de la humanidad.
-No exageres hombre, y deja de fumarte eso que fumas macho.
Acto seguido me pega una colleja.
-¿Quieres dejar de hacer el tonto y escucharme?
-¡Ay¡ Vale, vale.
-Aún ni siquiera yo me lo creo, pero he creado una máquina
capaz de producir un 150% más de la energía de la que consume. Yo lo llamo el
reactor cuántico. Usa la energía que generan ciertas reacciones físicas
cuánticas, para producir una ingente e inmensa cantidad de energía. ¿Recuerdas
el reactor de fusión? Pues mi reactor cuántico es infinitamente superior. Y lo
mejor es que es energía limpia, y eterna.
-Joder Carlos, estas son las consecuencias de faltar a
clase, y perderte el tema de la termodinámica. ¿Cómo vas a fabricar una
máquina, que viola una de las leyes más fundamentales de la física, y que
además use la cuántica como fuente de energía? ¡Es imposible! ¡En serio, dame
esa hierba porque yo también lo quiero flipar!
-Ven conmigo, te lo enseñaré.
No sabía si creerle o no, aunque nunca me haya engañado…
Pero que pueda existir algo así, es propio de los libros de ciencia ficción más
enrevesados. En fin, no tenía nada mejor que hacer esa tarde, así que me subí
con él en el coche y nos encaminamos, a lo que el llama, “la mayor revolución
en la historia de la humanidad desde el fuego.” Espero, que su “invento”, no
tenga consecuencias negativas…
Por fin!
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